Atrás quedaron ayer los temores del Gobierno y de todo un pueblo de la posible escenificación de una catástrofe ambiental de mayores proporciones si continuaban ardiendo los tanques de la antigua refinería Gulf, en Bayamón.
Continuación de la lectura, logran aplacar el fuego...Aunque hubo daños ambientales, se esperaba algo aún peor que afectara directamente la salud de miles de residentes del área. Sin embargo, a eso de las 4:00 de la tarde, el gobernador Luis Fortuño hizo el anuncio que todos esperaban: el infierno provocado el viernes por la inesperada explosión había sido extinguido gracias al esfuerzo y la movilización de cientos de personas.
Curiosamente, justo en ese momento, un arcoíris se posó en el ya despejado cielo sobre la antigua refinería, como si diera punto final al siniestro.
“Es trabajando en equipo que se logran grandes cosas. Este equipo de trabajo así lo ha hecho. Ya hemos apagado el fuego y la vida empieza a volver a la normalidad en aquellas comunidades que se vieron directamente afectadas”, indicó el Gobernador en una rueda de prensa en el coliseíto Pedrín Zorrilla, de San Juan.
Aún queda mucho por hacer, advirtió, tanto en el área de la antigua refinería como en las comunidades afectadas a consecuencia de la explosión.
Hoy comienza la reconstrucción de esas viviendas para que sus dueños puedan habitarlas. Hoy también continúa la heroica labor de los bomberos, quienes a pesar de haber apagado las llamas, seguirán en trabajos de mitigación en el área para evitar que cualquier chispa pueda activarse y provocar pequeños incendios.
No es hasta que ellos logren enfriar completamente el lugar, que podrán realizar las investigaciones de campo en la escena.
La explosión no causó víctimas fatales, pero varias personas resultaron con heridas leves y comunidades fueron desalojadas para proteger a sus residentes del humo.
a reconstruir
Desde hoy temprano, personal de la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias (Aemead) evaluará las residencias perjudicadas para cuantificar los daños y si éstas son seguras para sus residentes.
Fue la zona de Puente Blanco, en Cataño, la más afectada. Allí, se les desprendieron a las residencias ventanas, marcos de puertas y techos acústicos y de zinc.
Por eso, Fortuño apeló al sentido de solidaridad de agencias privadas y comercios, solicitándoles donativos de materiales de construcción para la reparación de las mismas.
El Gobierno se encargará de suplirle a cada una de esas personas sus necesidades, pues la declaración de emergencia nacional firmada por el presidente Barack Obama es para que los municipios y agencias estatales recuperen el dinero invertido durante la emergencia a través de fondos de FEMA.
“Vamos a dedicar esta semana a ayudarle a que sus casas vuelvan a la normalidad. Agradezco a tantas gente que nos quieren ayudar y nos van a continuar ayudando”, dijo.
sin pistas
También hoy se le dará seguimiento a la investigación sobre qué ocasionó la explosión, comandada por agentes del Negociado Federal de Investigaciones (FBI) y del Negociado de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF), quienes ayer comenzaron las inspecciones.
Del FBI llegaron 15 expertos y de ATF, otros 15, para un total de 30 peritos federales que viajaron desde Estados Unidos.
“Estamos en la etapa de hacer el plan de seguridad. No nos podemos anticipar. Es demasiado temprano para determinar las causas del fuego. Estamos intercambiando ideas. No hay nada que nos indique que esto se trate de sabotaje. Es muy temprano para decir”, manifestó el director del FBI, Luis Fraticelli.
Junto a agentes de la División de Explosivos de la Policía, harán entrevistas y recolectarán escombros y piedras que pudieran ser evidencia física en el esclarecimiento del caso.
F/PrensaEscrita
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