Nuevos escogidistas acaban a los Gigantes

Santo Domingo.- La nueva corriente escogidista no espero mucho tiempo para demostrar su capacidad de ataque y anoche se convirtió en principal protagonista en la ofensiva desarrollada por el club. Wladimir Balentien, Kevin Barker y Brayan Peña se combinaron para remolcar cuatro vueltas en el partido que los Leones le ganaron anoche por blanqueada 7-0 a los Gigantes, en choque celebrado en el estadio Quisqueya.

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Tan rápido como en el primer episodio, los nuevos miembros de los Leones hicieron sentir sus bates cuando Barker disparó sencillo al prado central que remolcó a Alexander Valdez desde la intermedia y Balentien trajó a Carlos Gómez al pentágono con incogible al izquierdo.

Dos episodios más tarde, Peña empujó la tercera con sencillo al derecho, entrando Bryan Mirrow en carrera. Gómez voló la verja entre los jardines central y derecho, luego de dos fuera en el cuarto episodio y frente al abridor y perdedor Aquilino López. En el séptimo, los melenudos marcaron un trío de vueltas, tras enviar nueve hombres al pentágono, episodio donde produjeron un trío de hits y recibieron tres boletos.

En total, la nueva sangre escarlata se despidió bateando de 16-6, se combinaron para cuatro producidas y dos anotadas. Los escarlatas atacaron a seis lanzadores con once imparables, los cuales superaron ampliamente los seis que produjeron el pasado domingo. Joaquín Arias fue el único miembro de la alineación abridora que no disparó de hit. Con su éxito, el Escogido se colocó junto al Licey en el primer lugar del round robin con marca de 2-1. Los azules vencieron a los Toros.

Mientras, acontecía la despiadada ofensiva del Escogido, Edward Valdez y cuatro relevistas rojos se encargaban de silenciar los bates de los Gigantes, equipo que recibió su segunda blanqueada en tres presentaciones en el round robin.

Valdez, (1-0) lanzó seis brillantes entradas, aceptó cuatro hits, abanicó a tres y concedió un boleto. Recibió el respaldo de Yunior Noboa, Jorge De Paula, José Veras y Félix Heredia, quienes se encargaron de completar la lechada.

Fue tan notorio el dominio del pitcheo rojo que apenas en el octavo capítulo fue que un jugador de los Gigantes ancló en la antesala y este fue Juan Francisco, quien había sido golpeado e incluso fue el episodio más amenazante, pues llegaron a ll
Por Pedro G. Briceño.