Colorado - La madre del pequeño Gore Otteson no puede creer que su hijo siga vivo. Y no es para menos. El pequeño de dos años de edad estuvo 25 minutos sumergido en agua congelada y, por si fuera poco, su corazón estuvo sin latir por una hora. Según informó el diario inglés Daily Mail, el niño ahora goza de muy buena salud.
MOMENTOS DE DESESPERACIÓN
A decir de la madre de Gore, su familia estaba de vacaciones en las Montañas Rocosas de un valle de Gunnison (Colorado, EE.UU.), el cual se caracteriza por las bajas temperaturas que incluso llegan a dos grados por la noche.
Amy contó que ella se encontraba sacando del baño a sus dos hijos de cinco y cuatro años cuando el pequeño salió de la cabaña por la puerta de atrás.
Cuando la mujer se dio cuenta de que su hijo no estaba en la cabaña, empezó a llamarlo y a ella se unieron 20 miembros de la familia que se encontraban en cabañas cercanas. Después de poco más de 20 minutos su primo David vio el cuerpo de Gore debajo de un tronco en una zanja de riego, muy cerca del río.
El corazón del pequeño no latía, pero su abuelo (un cirujano ortopédico jubilado) y su prima enfermera intentaron reanimarlo, aunque sabían que sus probabilidades de sobrevivir eran de 1%.
Los médicos que posteriormente atendieron a Gore se mostraron muy satisfechos que el menor pueda estar bien luego del terrible momento que pasó. Ellos dicen que los esfuerzos que hicieron el abuelo y la prima del niño fueron determinantes para asegurar su supervivencia.
EL TRATAMIENTO
Después de escuchar los latidos del corazón, los médicos temieron que se encontrara en muerte cerebral, sin embargo el niño movió un brazo y se procedió hacerle un tratamiento de hipotermia. Este tratamiento consistía en elevar la temperatura del cuerpo a 32 grados, cuando esto sucedió, el niño se despertó.
Los médicos creen que Gore ‘resucitó’ gracias a un reflejo que permite a mamíferos como las focas y los delfines que permanecen bajo el agua durante mucho tiempo. Según los médicos, el agua fría ralentiza el ritmo del corazón, especialmente en los niños, creando una especie de hibernación.
“ES FASCINANTE QUE ESTÉ VIVO”
“Lo que le ha pasado es algo fascinante”, dijo doctor Roger Sherman, el médico de emergencia que lo trató.
Por su parte, la madre de Gore no ocultó su alegría por el estado de su hijo. “Cuando desapareció, sabía que algo malo había ocurrido por el tiempo que había pasado. Recuerdo a mi padre entregando a Gore al paramédico. Cuando llegué al hospital seguía preguntando a la gente qué ocurría. De repente, entré y me dijeron que su corazón comenzó a latir. No podía creer lo que estaba escuchando”, expresó Amy.
..Fuente/El Comercio / Perú / GDA /
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