NUEVA YORK._ Anyeris Reyes, una joven dominicana de 22 años de edad y que se desempeña como guardia de seguridad en un edificio de la avenida Audubon en el Alto Manhattan, fue agredida e insultada por varios policías, después que se negara a ayudar a dos encubiertos a arrestar a un sospechoso de narcotráfico, alegando que eso no es parte de su trabajo. Reyes, quien se fracturó un tobillo cuando fue sacada violentamente de una van camuflada usada por la policía en redadas contra los narcos, puso una queja en la Junta de Revisión de Querellas Civiles (CCRB, inglés), contra los oficiales. Ahora, tiene que caminar apoyada en un bastón y añade que siente un dolor muy fuerte en el tobillo afectado.
Relató que cuando los policías llegaron al edificio el 19 de marzo y arrestaron al sospechoso, le pidieron a ella que los ayudara a someter al detenido, pero rehusó ayudar a los encubiertos, explicándoles que como guardia de seguridad no puede abandonar el inmueble, no usa chaleco anti balas, arma o esposas.
Los policías se molestaron tanto que profirieron varios insultos contra la dominicana que tiene estatura de 5´7 y pesa 255 libras, además de arrestarla también. El incidente ocurrió a las 8:00 de la noche. La calificaron de “tonta” y le reclamaron el que no los ayudó a someter el sospechoso.
“No soy policía, sólo soy guardia de seguridad y no se me permite salir del edificio en horas de trabajo”, les explicó la dominicana a los agentes. Cinco minutos más tarde, regresaron a la escena acompañados por un sargento quien le dijo que se levantara del asiento y fuera con ellos al cuartel 33.
La esposaron apretando la laca para que le dolieran las manos y se la llevaron detenida. Cuando le dijo a un policía que la esposa le estaba apretando demasiado y no podía aguantar, el oficial de respondió “¿por qué tenemos que ayudarla cuando usted no quiso ayudar a nuestros muchachos?”
Ese policía le dijo que se apoyara en su hombro para pasarla a otro vehículo, pero cayó al suelo fracturándose el tobillo. “Me dejó caer, querían reírse de mí, me levanté y me tiraron en el carro.
En la comisaría, la obligaron a identificar al sospechoso que estaba detenido junto a varios hombres. Fue acusada de un delito clase B por no ayudar a los policías y la acusación es la denegarse ayudar a oficiales de policía.
Fue citada a la corte para el 20 de abril.
Fue trasladada en una ambulancia al hospital Presbiteriano donde le hicieron un examen de rayos X que comprobó la fractura en el tobillo. Los médicos le dijeron que tendrá que durar muchos días con el dolor y caminar con dificultad. La querella fue presentada por ella en la CCRB el 24 de marzo. El Departamento de Policía dijo que se está investigando el incidente entre la dominicana y los oficiales acusados de agredirla.
..Fuente/Relató que cuando los policías llegaron al edificio el 19 de marzo y arrestaron al sospechoso, le pidieron a ella que los ayudara a someter al detenido, pero rehusó ayudar a los encubiertos, explicándoles que como guardia de seguridad no puede abandonar el inmueble, no usa chaleco anti balas, arma o esposas.
Los policías se molestaron tanto que profirieron varios insultos contra la dominicana que tiene estatura de 5´7 y pesa 255 libras, además de arrestarla también. El incidente ocurrió a las 8:00 de la noche. La calificaron de “tonta” y le reclamaron el que no los ayudó a someter el sospechoso.
“No soy policía, sólo soy guardia de seguridad y no se me permite salir del edificio en horas de trabajo”, les explicó la dominicana a los agentes. Cinco minutos más tarde, regresaron a la escena acompañados por un sargento quien le dijo que se levantara del asiento y fuera con ellos al cuartel 33.
La esposaron apretando la laca para que le dolieran las manos y se la llevaron detenida. Cuando le dijo a un policía que la esposa le estaba apretando demasiado y no podía aguantar, el oficial de respondió “¿por qué tenemos que ayudarla cuando usted no quiso ayudar a nuestros muchachos?”
Ese policía le dijo que se apoyara en su hombro para pasarla a otro vehículo, pero cayó al suelo fracturándose el tobillo. “Me dejó caer, querían reírse de mí, me levanté y me tiraron en el carro.
En la comisaría, la obligaron a identificar al sospechoso que estaba detenido junto a varios hombres. Fue acusada de un delito clase B por no ayudar a los policías y la acusación es la denegarse ayudar a oficiales de policía.
Fue citada a la corte para el 20 de abril.
Fue trasladada en una ambulancia al hospital Presbiteriano donde le hicieron un examen de rayos X que comprobó la fractura en el tobillo. Los médicos le dijeron que tendrá que durar muchos días con el dolor y caminar con dificultad. La querella fue presentada por ella en la CCRB el 24 de marzo. El Departamento de Policía dijo que se está investigando el incidente entre la dominicana y los oficiales acusados de agredirla.
Autor: Miguel Cruz Tejada /
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